“De la pandemia saldremos mejores”. Hay frases manidas y luego están esas que repetimos en charlas de videobar y que coinciden con deseos que ni nosotros nos creemos. Pero bueno, hay que ser positivos, estamos en Navidad y a punto de acabar un año convulso. El ser humano es el único animal que tropieza en dos o tres olas de coronavirus sin inmutarse, por eso las frases hechas y los deseos ingenuos nos seguirán haciendo compañías. Y empezaremos 2021 pensando en la efectividad de las vacunas y en cómo evitar, de una vez, que el vaho empañe las gafas cuando llevamos la mascarilla. En Levanta la cabeza no somos de hacer bazares navideños ni recomendaciones –algún listado sí hemos hecho–, pero como la normalidad ha mutado, os dejamos unas píldoras por dónde irá 2021: más teletrabajo, más videollamadas, más sostenibles...

Botón para finalizar las llamadas de Zoom

Cierto, el momento de acabar las videollamadas en Zoom con compañeros de oficina, familiares o amigos se ha convertido en un suplicio donde parece que el tiempo se ralentiza. Movemos los ojos en busca del cursor y del botón de ‘finalizar llamada’. Ese momento final donde no sabes si sacar la manita para decir adiós o esbozar una sonrisa cómplice. Está bien, son solo unos cuantos segundos, pero alguien tenía que inventar una manera de acabar de forma rápida y elegante una videollamada. La publicación The Verge mostraba ayer la fórmula desarrollada Brian Moore, director creativo de Anomaly: un cable de lámpara del que tirar y acabar al instante con la conexión.

Ropa interior circular

Todos queremos ser más sostenibles y la industria de la moda no sabe qué hacer para satisfacer las exigencias del consumidor. La empresa [[LINK:EXTERNO||||||The big favorite]] vende bragas, calzoncillos y camisetas interiores 'circulares'. ¿Y esto qué es? Cuando las prendas usadas se desgastan y ya no hay quien se las ponga, la empresa emergente norteamericana te facilita que las devuelvas para ser desinfectadas. Entonces, el algodón se reciclará para fabricar nuevos productos. No es mala idea porque la ropa interior suele acabar en la basura, lo que equivale a kilos y kilos de tejidos desechados. Los compradores interesados deben hacer un último lavado de la ropa y escanear un código QR para crear una etiqueta de envío gratis al fabricante, que se encargará del reciclaje. Hasta ahora, la única segunda vida que tenía la ropa interior estaba vinculado a cierto fetichismo sexual.

Taza con control de temperatura para el teletrabajo

En el primer confinamiento provocado por el estado de alarma no solo hubo problemas para comprar masa madre o papel higiénico. Las sillas de oficina se agotaron en muchos grandes establecimientos y la espalda lo notó. Con millones de empleados trabajando desde casa, han surgido todo tipo de artilugios que facilitan el desempeño laboral en casa. Nuevas cámaras para videoconferencias más fiables, amplificadores de internet, tapas para ocultar la cámara del ordenador, limpiadores de migas para teclados o aparatos para colocar debajo de la mesa y hacer ejercicio, entre otros gadgets. La compañía Ember ha creado una taza de café o te con control de temperatura.

Papel de regalo reutilizable

El 25 de diciembre y el 6 de enero los contenedores de basura se llenan de papel de regalo de todas las formas y colores. El cuidado del planeta necesita pequeños gestos en un mundo que empieza a girar en torno a la sostenibilidad. Una empresa japonesa vende una tela ecológica que sirve de envoltorio. FuroShiki quiere que usemos una y otra vez estos envases como papel de regalo. Con diseños típicos nipones, este tejido reutilizable es una alternativa práctica para no malgastar papel, cinta adhesiva y lazos de plástico.

Libro para no ser un cretino digital

2020 también ha sido el año de las pantallas. Tanto tiempo confinados ha provocado un incremento impresionante del uso (y abuso) de televisores, ordenadores, tabletas, teléfonos móviles... Hemos trabajado, estudiado, jugado y descansado con una pantalla delante y cada vez son más los científicos que advierten de sus riesgos. El neurocientífico francés Michel Desmurget, director de investigación en el Instituto Nacional de la Salud de Francia, ha publicado 'La fábrica de cretinos digitales', donde después de analizar cientos y cientos de investigaciones concluye que el mal uso de las pantallas puede influir sobre el rendimiento escolar y el desarrollo intelectual y la salud de adolescentes y jóvenes.

Finalizamos con un consejo, #LevantaLaCabeza, aprende a desconectar y mira este anuncio que forma parte de una campaña navideña bastante gamberra.