Han crecido paralelos a Internet. Han visto a la tecnología avanzar con ellos y han sido testigos del nacimiento de todas las aplicaciones. Siempre se les ha considerado personas hiperconectadas y el móvil ha sido como una extensión de su propia mano. Y, a pesar de todo esto, odian hablar por teléfono. Así lo revela el estudio‘Generation Mute: Millennials phone call statistics’, de la empresa norteamericana BankMyCell, gracias a las respuestas de 1.200 millenials(nacidos entre 1982 a 1994). ¿Cuántos evitan las llamadas, a quién no se lo cogen y cuáles son las excusas más comunes?

Entre los participantes, el 74% declaraban que evitan las llamadas porque consumen demasiado tiempo y los millennials prefieren una comunicación rápida, efectiva y directa al grano, sin necesidad de pasar por una conversación previa vacía preguntando cómo están o cómo ha ido el día. Sin embargo, el segundo motivo que hace que no cojan el teléfono es evitar a personas quejicas y molestas, con un 64%. Por otra parte, el 46% responde que prefiere no hablar por teléfono para evitar la confrontación verbal, y esto tiene su porqué, ya que la espontaneidad de una conversación por teléfono hace que no puedas meditar tus respuestas, tal y como harías si esa misma discusión fuese a través de mensajes. Además, el 41% explica que no coge el teléfono porque rara vez están solos en una habitación y es incómodo que otros escuchen tu conversación. Una de las conclusiones que se extraen de las respuestas de los jóvenes es que consideran que las llamadas son molestas, inoportunas y que te pueden interrumpir mientras haces cualquier actividad.

El estudio también analiza cuáles son las excusas más comunes para evitar las llamadas. En primer lugar, una que prácticamente todo el mundo ha utilizado:“tenía el teléfono en silencio, no me he dado cuenta de que has llamado”, con un aplastante 63%. Esta parece ser la justificación más legítima, pues es muy común tener en móvil sin sonido. Le sigue,“tenía mala señal”,“estaba en una reunión” o“estaba conduciendo”, con un 12%, 9% y 6%, respectivamente.

¿A quién evitan?

Los datos son curiosos y representativos, ya que los más ignorados son los amigos, con un 29% de llamadas sin responder, seguidos de padres y familias, con un 25%. Al fin y al cabo, saben que, a pesar de no cogerlo, les van a perdonar y van a estar ahí inevitablemente. Eso sí, los menos ignorados, por encima incluso que sus jefes (el 14% no les coge la llamada) son las parejas. Tan solo el 11% evita responder a una llamada de su pareja.

El 81% tiene que prepararse antes de hacer una llamada

Un rotundo 81% declara que tiene que armarse de valor antes de hacer una llamada de teléfono. Es decir, cuatro de cada cinco millennials siente que tiene que prepararse antes marcar.

¿Por qué? Porque se sienten expuesto, no tienen tiempo de pensar la respuesta y les preocupa quedar mal, no argumentar bien o decir algo que es incorrecto. Por desgracia, y tal y como explica el estudio, esto hace que muchas personas no desarrollen ciertas habilidades comunicativas y se aislen cada vez más.