Una de nuestras principales preocupaciones constantes es protegernos de ciberataques, estafas o fraudes digitales. En términos generales sabemos la importancia de algunas técnicas de protección de datos como cambiar las contraseñas, no compartir información confidencial con remitentes dudosos… Sin embargo, hay ciertas acciones que tenemos automatizadas y no nos replanteamos, como tirar documentos con datos sensibles a nuestra papelera digital o física.

Los ciberdelincuentes encuentran en acciones tan simples como estas el camino idóneo para la estafa, ya que muchas veces confiamos en que trasladar documentos a la papelera del escritorio o tirarlos directamente es sinónimo de que desaparezcan.

Se llama ‘trashing’ o ‘dumpster diving’ a la búsqueda de de datos sensibles de usuarios en las papeleras para cometer ciberestafas. Hay varios tipos de procedimientos, desde ‘trashing’ físico, que se refiere a la búsqueda de información sensible en basuras físicas, como pueden ser discos duros, embalajes con etiquetas que incluyen nombre y dirección, dispositivos electrónicos… O ‘trashing’ digital, que sigue el mismo procedimiento pero en la papelera de nuestros dispositivos.

¿Cómo nos protegemos?

Es importante conocer este tipo de prácticas para protegernos adecuadamente, tal y como explica Europa Press. Técnicas tan simples como tachar datos personales de un documento, triturarlos o destruir adecuadamente o formatear un dispositivo que ya no sirve antes de tirarlo a la basura nos pueden proteger de un ciberataque.

En el caso del‘trashing’ online es importante saber que no basta con moverlos a la papelera. Se recomienda utilizar mecanismos seguros o utilizar una herramienta que realice un borrado seguro que impida la recuperación de ficheros.

El Instituto Nacional de Seguridad(Incibe) explica que este tipo de prácticas en las que se consiguen datos personales puede hacer que los delincuentes sean capaces de extorsionar a la víctima robarle la identidad o su dinero.