Jordi Jané ha presentado una Proposición No de Ley para que el Congreso vote que los radares se coloquen en sitios peligrosos.
Con motivo del inicio de la campaña de vigilancia en las carreteras secundarias, el pasado mes de junio, María Seguí, la directora general de Tráfico anuncia que recolocará el 50% de los radares en puntos peligrosos de las carreteras convencionales.
Amparo López, directora de Tráfico del Gobierno vasco, comunica que retiran un radar que ya no salva vidas. El radar de tramo en la N-I entre Ordizia e Irura, de 19,5 kilómetros de recorrido, dejó de ser operativo y no sancionará más tras un año de funcionamiento. Tráfico consideró que se habían cumplido los requisitos para los que se instaló y la velocidad media se redujo de manera significativa. Este tramo estaba catalogado como uno de los puntos negros de la accidentalidad, no sólo en Euskadi sino en toda la península.
Juntos lo estamos consiguiendo y seguiremos trabajando para que haya radares, pero no para recaudar. Más de 100.000 gracias.