A partir del lunes 11 de mayo, se ha activado en parte del país la primera fase de desescalada, que permite desarrollar distintas actividades de manera excepcional, ante la pandemia de Covid-19. De esta forma, la fase 1 de desescalada garantiza el uso de vehículos motorizados de dos ruedas como motos o ciclomotores, con dos ocupantes por vehículo.

No obstante, para ello es necesario cumplir con distintas normas. Por una parte, solo se permitirá el desplazamiento dentro de la provincia o unidad territorial adscrita a esa fase 1. Además, se establece la obligación de portar guantes en todo momento, en caso de tratarse de un vehículo compartido o de alquiler.

No obstante, mientras que en el caso del conductor llevar guantes solo es obligatorio si se trata de motos o ciclomotores compartidos, el acompañante debe hacer uso de esta medida de seguridad en todo momento. A estos respectos, la normativa admite los guantes de protección de motoristas.

Por otra parte, y más concretamente, la nueva orden del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana hace referencia a las motocicletas, ciclomotores y vehículos de categoría L, cuyos pasajeros deberán portar casco integral con visera, o usar mascarilla en caso de que el casco no sea integral, o residir en el mismo domicilio.

En cuanto al tipo de desplazamiento, la normativa justifica y contempla como excepciones el traslado a otras partes del territorio nacional por motivos sanitarios, laborales, profesionales o empresariales. También se incluyen en este punto los traslados de regreso al lugar de residencia familiar, o por asistencia y cuidado de personas en riesgo, como mayores, dependientes o personas con discapacidad.

Por último, entran en estas excepciones otros motivos de fuerza mayor o de extrema necesidad.