El estudio aclara aspectos de los mecanismos moleculares implicados en el cáncer de cabeza y cuello, allanando el camino para nuevas estrategias de prevención y tratamiento, u otras intervenciones que podrían beneficiar a los pacientes, como han publicado en la revista científica International Journal of Molecular Sciences.

Históricamente hablando, las principales causas del cáncer de cabeza y cuello, un grupo de cánceres de boca, nariz, senos paranasales, amígdalas, garganta y tiroides, han sido el alcohol, el tabaco y la mala higiene bucal, pero en las últimas décadas el VPH se ha convertido en un factor de riesgo importante para las personas más jóvenes. En 2020 afectó a unas 830.000 personas en todo el mundo, causando la muerte de más del 50%. El cáncer de cabeza y cuello es ahora uno de los tipos de cáncer asociados al VPH que más rápido está aumentando en el mundo.

Los autores del estudio explican que en lugar de seguir analizando el tabaquismo y el VPH como factores oncogénicos por separado, se han propuesto centrarse en su posible interacción. Y es que, tanto el tabaquismo como el VPH están asociados a un mayor estrés oxidativo y daño del ADN, que son factores del cáncer y, según investigaciones anteriores, pueden regular la superóxido dismutasa 2 (SOD2), un biomarcador putativo de malignidad del cáncer oral.

Para ello, lo primero que hicieron los investigadores fue realizar experimentos ‘in vitro’ para analizar células orales que expresaban las oncoproteínas HPV16 E6 y E7 (que muestran la infección por el VPH) y que estaban expuestas al condensado del humo del cigarrillo.

Observaron así que los niveles de SOD2 y de daños en el ADN aumentaban significativamente en comparación con los controles, lo que apuntaba a una interacción perjudicial entre el VPH y el humo de los cigarrillos.

Las células de control expresaban menos SOD2 que las células que expresaban E6 y E7 o las células expuestas al humo del cigarrillo. Por su parte, las células que expresaban las oncoproteínas y estaban expuestas al humo del cigarrillo expresaban más SOD2 que cualquiera de las dos, lo que indica una interacción entre la presencia de los genes del VPH y el humo del cigarrillo.

La segunda etapa del proyectó se basó en un análisis de los datos genómicos de 613 muestras de The Cancer Genome Atlas, un repositorio público que contiene las mutaciones genéticas responsables del cáncer (derivadas de la secuenciación del genoma y la bioinformática).

Los investigadores se centraron en el análisis de las transcripciones de SOD2 para confirmar los hallazgos dando paso a la siguiente fase del estudio, donde se aumentó la complejidad del modelo utilizado analizando la cuestión funcional en el contexto de la expresión normal de proteínas víricas.

El autor principal del estudio, Enrique Boccardo, ha señalado que no se debe olvidar que acontecimientos como los procesos inflamatorios no pueden observarse in vitro, pero se sabe que desempeñan un papel muy importante en los resultados de la enfermedad.