Casi dos años después del lanzamiento de esta iniciativa, que ha conseguido el apoyo de las comunidades de Madrid, Valencia y Asturias, sumándose así a Andalucía, Cataluña, Canarias y País Vasco, que contaban ya con una regulación al respecto, Constantes y Vitales arranca una nueva fase de su campaña en la que urge al resto de Administraciones a aplicar una normativa a favor de la cardioprotección, que incluya la obligación de instalar desfibriladores en espacios públicos.

Cada año mueren en nuestro país 30.000 personas y con un desfibrilador se podrían salvar más de 4,500 vidas al año.

Si quieres tu tu comunidad sea un espacio cardioprotegido y sea obligatorio la instalación de desfibriladores enespacios públicos, firma nuestra petición.