Se trata de una nueva investigación, llevada a cabo por un grupo de científicos de la Unuversidad James Cook, con el objetivo de de analizar el impacto de la temperatura del agua de las larvas de peces en un área de 2.000 kilómetros entre el sur de la Gran Barrera de Coral y el norte de Papúa Nueva Guinea, cercana a la línea ecuatorial.

La mayoría de los peces marinos atraviesan por una etapa de desarrollo larval en el mar abierto que los hace más vulnerables a los depredadores . 

"Descubrimos que dónde las temperaturas se calentaron por encima de un punto cerca del Ecuador, a unos 29 grados, el ritmo del desarrollo de las larvas se retrasó", dijo el autor del estudio, Ian McLeod, en un comunicado de la universidad.

El coautor del trabajo, Philip Munday, alertó sobre la vulnerabilidad de los peces ecuatoriales al calentamiento global mientras otro investigador, Geoffrey Jones, alertó de que millones de personas en las zonas ecuatoriales dependen de la pesca para vivir.