El príncipe Guillermo, como presidente de la organización United for Wildlife, ha pedido en un encuentro en Hanoi, en Vietnam, un endurecimiento de las medidas para frenar el contrabando mundial de animales.

El duque de Cambrige ha apuntado que han aumentado los controles fronterizos para interceptar los cargamentos, pero los cazadores furtivos y contrabandistas van siempre "un paso por delante" y logran sortearlos.

Pero este no es el único problema, sino que los cazadores también atacan y asesinan a los guardabosques y agentes que controlan la seguridad sobre el terreno.

Este problema provoca un descenso de la población de ciertos animales. Así, en la actualidad solo quedan entre 400.000 y 650.000 elefantes africanos, según señala la organización Traffic, y unos 3.900 tigres salvajes, según WWF. Pero también afecta a otras especies como los leones o los rinocerontes.

Guillermo de Inglaterra ha instado a los gobiernos a que aumenten las medidas, sobre todo en el comercio de marfil, donde la demanda sigue al alza puesto que algunas comunidades como la china o la vietnamita los consideran como objetos de arte o sagrados.