El delfín varado en la playa de Calafell y al que decenas de voluntarios estaban ayudando a mantenerse hidratado ha muerto hoy, aparentemente por causas naturales, ha informado el Departamento de Agricultura, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente de la Generalitat. 

Los restos del animal serán trasladados a la Universidad Autónoma de Barcelona para realizar una necropsia que ayudará a conocer las causas de la muerte y de acuerdo también con un convenio que establece que este tipo de ejemplares muertos se pueden aprovechar en el campo de la investigación para mejorar el conocimiento de la especie.

El delfín, que se trataba de un calderón gris, fue devuelto mar adentro el mismo lunes por la noche con la ayuda de vecinos y de la Cruz Roja, pero de nuevo volvió a la costa aumentando el riesgo de quedar varado. Desde entonces, decenas de voluntarios intentan mantenerlo con vida.

Si un cetáceo llega a la playa es porque está enfermo o herido, según los técnicos de fauna marina, que instan a la población a llamar al 112 si avistan alguno, ya que son ls Agentes Rurales los que deben evaluar la situación y activar la red de rescate.

La especie del calderón gris, aunque es bastante rara, mantiene una población estable en la costa central catalana y el estudio de estos cetáceso es útil para la investigación científica y de protección de estas especies marinas protegidas.