El concurso 'Desafío de Ciudades', en inglés 'We love Cities', ha contado con la participación de 126 ciudades de 21 países, de las cuales 16 eran españolas. El reto consiste en ser la localidad que mayores esfuerzos está realizando para combatir el cambio climático. En 2015, las elegidas fueron Córdoba y La Coruña.

"Tras meses de evaluaciones, una consultora internacional ha analizado la información facilitada por las 16 ciudades españolas y ha concluido que Murcia y Palma de Mallorca son las finalistas a nivel nacional del Desafío de las Ciudades de WWF 2015-2016", rezaba un comunicado de la asociación conservacionista.

Estas dos ciudades españolas han sido elegidas gracias a sus planes de movilidad sostenible, además de su desarrollo de medidas innovadoras para reducir las emisiones y fomentar el uso de las energías renovables.

El jurado internacional de expertos eligirá, entre todas las seleccionadas, cuál es la 'Capital Nacional de la Hora del Planeta'. Solo las ciudades ganadoras en la categoría nacional podrán optar al premio final y obtener el galardón de 'Capital Global de la Hora del Planeta'. La ganadora se conocerá el 21 de junio en un evento en que se celebrará en Madrid.

"España vueleve a participar en el 'Desafío de WWF' por segundo año consecutivo con un notable incremento de ciudades participantes respecto a la edición anterior, pasando de 3 a 16 ciudades", han expresado desde la organización.

Murcia y Palma de Mallorca han sido elegidas para optar al galardón nacional y solo la ganadora pasará a la gran final mundial como Capital Global de la Hora del Planeta, cuya ceremonia de entrega de premios coincide con la Conferencia de Naciones Unidas Habitat III del 17 al 19 de octubre en Quito, Ecuador.

¿Por qué Murcia y Palma de Mallorca?

La candidatura de Murcia se ha centrado en su nuevo Plan de Movilidad Sostenible para mejorar el transporte, como el desarrollo de sus líneas de tranvía. También está promocionando el vehículo eléctrico y de bajas emisiones.

La otra finalista, Palma de Mallorca, ha encontrado la forma de utilizar medidas innovadoras para reducir las emisiones y fomentar el uso de energías renovables. A partir de residuos, se aprovecha el biogás para generar electricidad renovable y calor.