En días tan calurosos como los que estamos pasando lo mejor es darse un baño para refrescarse, o si no que se lo pregunten a este oso Bruiser que disfruta con un buen chapuzón.

El protagonista de este vídeo, que ya cuenta con más de 2 millones de visualizaciones, es un oso residente en un recinto de animales exóticos en Estados Unidos que sube las escalerillas y se tira a una piscina como si fuera un humano, e incluso juega con una tabla de surf.

La escena, subida a la red el pasado 18 de junio, se grabó en el santuario de animales exóticos y en peligro de Single Vision, en la localidad estadounidense de Melrose, en pocos días en un fenómeno viral que suma casi dos millones de visualizaciones en Youtube.