Trump ha firmado una orden ejecutiva que podría volver a poner en peligro el Ártico. Con esta firma, el presidente de EEUU revisará las prohibiciones para explotaciones petroleras en las costas del país, lo que podría abrir zonas del Ártico o el Golfo de México a nuevos pozos. 

Trump ha asegurado que tiene como uno de sus objetivos poner fin a las prohibiciones creadas por la Administración del expresidente demócrata Barack Obama a las prospecciones en el zonas del Ártico en Alaska algo que, en su opinión, creará nuevos empleos. 

La orden revisará todas las concesiones públicas para la industria del gas y el petróleo y considerará levantar regulaciones que limitan la instalación de pozos petroleros o de gas, así como instalaciones de energías renovables en aguas federales protegidas. 

La orden firmada es un nuevo paso por parte del Gobierno de Trump para favorecer las industria de los hidrocarburos, levantar regulaciones en emisiones y protección del medioambiente con el objeto, según el presidente, de crear más empleos. 

Pero de llevarse a cabo, podría suponer un grave problema para el Ártico ya que en esta zona viven muchos animales y el cambio climático está provocando que el hielo se derrita a mayor velocidad.