El desconfinamiento tiene sus fases. Y el teletrabajo parece que también. Llegó por necesidad y como una apisonadora. Cientos de empresas mandaron a sus empleados a trabajar a casa, por seguridad y salud. Ahora que han pasado más de dos meses desde la declaración del estado de alarma, muchos apuestan por extender el teletrabajo y hay empresas que piensan que hasta el próximo año no se replantearán la vuelta presencial de sus trabajadores. Entramos en una nueva fase donde lo importante es organizarse en casa, aprender a crear rutinas, también a desconectar. Es el momento de las buenas prácticas en el teletrabajo para que cuando regresemos del verano, todo sea más eficaz y llevadero.

Solo un 8 % de la población española lo hacía, según la Encuesta de Población Activa (EPA). Pero llegó el 12 de marzo, una pandemia y una crisis sanitaria, y nuestro país ha visto cómo hasta un 80 % de las empresas ha fomentado el trabajo en remoto y casi un 31 % de los empleados del país podría teletrabajar, según el estudio 'El trabajo en España', publicado el 12 de mayo por el Banco de España. Los expertos calculan que hasta 10 millones de trabajadores lo estarían haciendo a distancia. En las mesas empresariales ya se está planteando incluso extender el teletrabajo y proclamarlo de forma indefinida. Administrativos, contables, empleados de oficina, técnicos y profesionales científicos, son los perfiles más favorables para poder desarrollar su actividad desde casa. A esta lista se suman nuevos sectores como el de las actividades financieras y de seguros, información y comunicación y actividades inmobiliarias. Además, en su informe, el Banco de España también reitera que hay sectores como el de la administración pública, el comercio, actividades de saneamiento y gestión de residuos donde hay un margen muy elevado de mejora para potenciar el trabajo a distancia. El último en anunciar que sus trabajadores podrán trabajar en casa de forma indefinida ha sido Mark Zuckerberg, que el pasado 21 de mayo lo comunicó oficialmente.

Parece que el trabajo desde nuestros domicilios ha despegado en España, y lo ha hecho para quedarse. El Banco de España explica que “en la actual fase de desescalada, el teletrabajo puede ayudar a un retorno progresivo a los puestos de trabajo que haga compatible la actividad con el mantenimiento de la distancia de seguridad y limitar la posibilidad de rebrotes”, sin olvidar que “el teletrabajo requiere una cierta inversión en equipo informático y tecnológico y un determinado nivel de formación por parte del trabajador”. No hay una fecha definida para volver a un espacio físico de trabajo común, pero desde el Gobierno e instituciones como la del Ayuntamiento de Madrid ya se están haciendo planes de buenas prácticas en la vuelta a los centros de trabajo. La incorporación será gradual, con medidas estrictas de seguridad e indicaciones concretas para evitar un aumento de contagios. Ante esta nueva situación, también se plantea compaginar la presencia física con el teletrabajo a largo plazo y otras empresas, incluso, apuestan por fomentar el trabajo telemático de forma indefinida. Grandes bancos y aseguradoras españoles o con sede en nuestro país ya han explicado a sus trabajadores que no volverán a la oficina, como mínimo hasta el mes de octubre.

Twitter es un ejemplo de esta última situación. El CEO de la compañía, Jack Dorsey, anunció a la NBC que la empresa permitirá a sus empleados trabajar de forma permanente desde sus hogares, sin tener que volver a la oficina de forma presencial cuando finalice el estado de alarma y la pandemia. Teletrabajar en esta compañía ya se planteó en febrero de este año, cuando el mismo Dorsey afirmó que las oficinas de San Francisco ya no eran tan útiles como antes. Además, Jennifer Christie, directora de recursos humanos de la red social, también explicó en el blog que “Twitter fue una de las primeras compañías en ir a un modelo de trabajo desde casa frente a la COVID-19, pero no anticipamos ser una de las primeras en regresar a las oficinas”. Al planteamiento que está realizando la compañía de Jack Dorsey, también se encuentran empresas como WordPress, que cerró sus oficinas presenciales en 2017 para trabajar en remoto por completo.

Aunque el teletrabajo no es una novedad, el confinamiento ha puesto en bandeja una oportunidad para comenzar a desarrollar esta nueva filosofía de trabajo. A largo plazo, el objetivo de numerosas empresas que desarrollan su actividad en España es apostar por una implementación de la tecnología para crear espacios de trabajo inteligentes. En los últimos días se está hablando de aprobar más pronto que tarde una legislación del teletrabajo que garantice los derechos laborales y la desconexión, recoja los riesgos laborales, sobre todo físicos y psicosocial, y regule cómo resarcir los gastos inherenetes (electricidad, agua, gas, etc...). Hasta que llegue, no te olvides de que el teletrabajo requiere organización. Aprende a desconectar cuando tu hogar y tu oficina están en el mismo sitio.