Algunos de los mayores controlan muy bien las nuevas tecnologías, pero a otros les cuesta un poco más. La mayoría recurre a sus nietos cuando no entienden algo, pero estos se enfadan y no tienen la paciencia necesaria, aseguran los mayores.

A los abuelos les falta conocimientos digitales básicos, tanto es así que cuatro de cada diez necesitan ayuda con las herramientas digitales. Y sus nietos tienen poca paciencia, el 24% de los jóvenes no regala dispositivos electrónicos a sus familiares mayores para evitar tener que ayudarles. “Se enfada, dice que tengo que aprender” asegura una señora. Una joven lo reconoce, “intentas regalarle lo que funcione lo más fácil posible”.

Los mayores se entretienen aprendiendo y se sienten más libres cuando lo consiguen. Además, que estén conectados es una tranquilidad para sus familias.