Del total de 158.492 siniestros viales con víctimas que se registraron en las carreteras españolas en 2021, el 28% de los turismos implicados tenía algún tipo de anomalía, una cifra que asciende al 31% en el caso de las vías urbanas, según cifras de la Dirección General de Tráfico (DGT).

Los datos son "una evidencia más" de que existe una "estrecha relación" entre estado del vehículo con su seguridad, según han explicado desde la Asociación Española de Entidades Colaboradoras de la Administración en la Inspección Técnica de Vehículos AECA-ITV.

En el momento del siniestro, tenían algún defecto o anomalía el 67% de los autobuses, el 53% de las motocicletas, el 40% de las furgonetas y el 36% de los camiones.

Los vehículos de más de diez años son los que más anomalías sufren, representando el 67% de los casos. "Este es un factor importante, debido a que la antigüedad media del parque de vehículos es de 14,6 años", según han apuntado desde AECA-ITV.

Los defectos más comunes detectados fueron problemas relacionados los neumáticos y anomalías en la dirección y en los frenos.

"Estos datos muestran la evidente relación que existe entre un correcto funcionamiento de los sistemas del vehículo con la seguridad del mismo. Por eso la ITV es tan importante, pues solo a través de las inspecciones técnicas se pueden detectar defectos que, de otra manera, no se conocerían", ha asegurado el director gerente de AECA-ITV, Guillermo Magaz.

En la misma línea, de acuerdo con el estudio 'Contribución de la Inspección Técnica de Vehículos a la seguridad vial y al medio ambiente', elaborado por el Instituto de Seguridad del Vehículo Automóvil Duque de Santomauro (ISVA) de la Universidad Carlos III de Madrid, gracias a las ITV realizadas durante el año 2021 se han evitado al menos 15.641 siniestros viales, 13.110 heridos y 148 muertes.

Además se estima que si los vehículos que se saltaron la ITV la hubieran hecho se habrían evitado más de 13.000 siniestros viales, 11.000 heridos y 150 muertos.