Los niveles de tráfico todavía no se han recuperado y se mantiene una reducción del 20% de media respecto a la época anterior a la pandemia. En concreto, ha descendido un 16 % a diario y un 33 % los fines de semana.

La caída más acusada de la movilidad tuvo lugar durante el periodo de confinamiento más duro, cuando se alcanzó una reducción del 87% de los desplazamientos.

El mínimo histórico tuvo lugar el domingo 5 de abril, previo a Semana Santa con una reducción del 95,23% de vehículos en las carreteras españolas.

En verano, los desplazamientos de largo recorrido aumentaron, aunque por debajo de años anteriores y volvieron a caer con la llegada de la segunda ola de la pandemia y el regreso de las restricciones a la movilidad.

La movilidad en las fronteras también se ha visto reducida de manera drástica hasta la tercera fase de la desescalada.

Los accesos a las grandes ciudades han reducido la circulación. Para la Dirección General de Tráfico, el teletrabajo y que no se haya producido una incorporación total de todos los trabajadores a sus puestos, son algunas de las principales causas de esta reducción.

Del 15 de marzo al 20 de junio de 2020 los accesos a las ciudades se redujeron un 56%. En la actualidad están en un 19%.