Ángel Martín es mucho más que un cómico. Tras sus múltiples facetas artísticas como actor, guionista y músico, mayormente conocido por haber sido presentador del programa televisivo 'Sé lo que hicisteis'. Aunque ahora triunfa a través de las redes sociales con su ‘Informativo matinal para ahorraros tiempo’, Ángel Martín se lanza al mundo de la escritura con su primer libro: 'Por si las voces vuelven'.
En 2017, Ángel sufrió un brote psicótico por el que estuvo ingresado 15 días en el hospital. Este suceso le ha inspirado para escribir este relato en primera persona donde manifiesta la importancia de cuidar la salud mental y acabar con los tabúes que la rodean.
El periodo de reconstrucción personal es el más importante. Ángel asegura que en su libro, las personas que se sientan cercanas a vivir una situación como la suya pueden encontrar una herramienta de ayuda en esta historia vitalista.
Es un proceso intenso y largo. Cuando le preguntan sobre si las voces de su cabeza han desaparecido, afirma que "las voces se quedan" y que "afortunadamente no desaparecen nunca". Aprender a gestionarlas y a saber a cuáles tiene que escuchar y a cuáles no, le ha llevado mucho tiempo y esfuerzo.
Para cuidar la salud mental es muy importante que alguien te escuche. Ángel cree que la gente es poco empática: "Creo que la gente finge que escucha pero no escucha. En el momento en el que alguien escucha de verdad es imposible no ser empático". A su vez, asegura que proteger nuestra mente es igual de importante como que quiénes nos rodean también gocen de buena salud mental. "Es muy difícil que si tú estás mal, la persona que está contigo no lo esté", advirtiendo que es urgente empezar a ver la salud mental como algo común.
'Por si las voces vuelven' promete ser un libro de enseñanza, de que se puede salir adelante. Demuestra que no todo es cuestión de dinero, que hay cosas que las podemos solucionar nosotros mismos porque somos nuestra herramienta más potente.
La historia de Ángel es un impulso vital, de reconstrucción, de coger las piezas y volverlas a encajar para ser una nueva persona.