El café molido que ya non quieren cientos de locales de la capital británica ahora serán reutilizados gracias a una startup británica denominada, bio-bean. ¿El objetivo? Crear un combustible alternativo para los autobuses londinenses, según la BBC.

La compañía recolecta de fábricas, restaurantes o cafeterías estos desechos para de ahí extraer el aceite de café que después se mezcla con otros combustibles para crear el biofuel B20.

Una alternativa al combustible tradicional con la que compañía pretende reducir hasta un 15% las emisiones de dióxido de carbono en el sector del transporte.