El profesor de la Universidad Federal de Paraiba (Brasil), Ronaldo Francini, y el coordinador de la campaña de océanos de Greempeace USA, John Hocevar, se han sumergido en la primera expedición submarina para observar los corales del Amazonas.

Gracias a esto, han conseguido captar las primeras imágenes de su único arrecife, que puede albergar vida en forma de corales a pesar de las condiciones inhóspitas de la zona.

El viaje submarino ha durado alrededor de 4 horas y han recorrido más de 220 metro de profundidad y más de 100 kilómetros de la costa brasileña para encontrar este arrecife rico en esponjas, corales y rodolitos.

Cuando lo han hallado, han tenido que elevarse hasta 180 metros para contemplar toda su belleza desde la cima.

Este arrecife solo se había investigado desde la superficie, con la toma de muestras con redes. Pero gracias a esta expedición, han podido tomar ejemplares de primera mano con la que conseguirán entender mejor este mundo.

Esta zona se encuentra amenazada por la industria del petróleo, que buscan bajo su lecho este "oro negro" y perjudica la supervivencia de estas especies.