Tras la puesta en libertad de dos ejemplares de lince ibérico, de los ocho que se pretenden soltar en las zonas de Guarrizas (Jaén) y Gualdamellato (Córdoba), le toca el turno a Extremadura,  en concreto será en el valle de Matachel, situado Badajoz.

En esta zona extremeña está previsto soltar a ocho ejemplares de lince a partir del mes de febrero de 2017, cuatro hembras y cuatro machos. 

De todos ellos, seis serán liberados por el método de suelta dura, directamente al medio, puesto que están "mejor adaptados para desenvolverse adecuadamente en su entorno". Los otros dos serán reintroducidos dentro del cercado de adaptación, para que se incorporen de forma progresiva.

Con estas sueltas se pretende crear un "asentamiento estable" de parejas reproductoras en la zona y favorecer el "reforzamiento genético" de la población en Extremadura que, en la actualidad, es de 22 linces.

Todos ellos dispondrán de un GPS de localización para hacer un seguimiento de desplazamientos, analizar sus hábitos y asegurar la supervivencia.

Para que esto se lleve a cabo, ha sido necesaria la colaboración de los propietarios de las fincas, el apoyo de la Federación Extremeña de Caza, del SEPRONA de la Guardia Civil, de los ayuntamientos de la zona, las diputaciones provinciales, las consejerías de Educación y Empleo, los agentes del Medio Natural y la Universidad de Extremadura (UEx).

Gracias al proyecto LIFE+Iberlince las poblaciones de estos animales han aumentado y ya son 475 ejemplares los que habitan en la península.