Para llegar a estas conclusiones, se realizó un sondeo, por teléfono a 527 adultos estadounidenses, entre el 2 y el 4 de junio. 

El resultado fue claro y el 59% respondió: No a la salida de EEUU del Acuerdo de París, al argumentar que este pacto pone en "permanente desventaja' a la economía y que afectará a sus puestos de trabajo. El 28% lo apoyó y el 13% no opinó.

Con esta decisión de Trump, EEUU abandona su compromiso, propuesto por el anterior presidente, Barack Obama, de reducir para el año 2025 las emisiones de gases de efecto invernadero entre un 26 y un 28% respecto a los niveles del 2005. 

Además, EEUU continuará siendo uno de los países más contaminantes y esta decisión desecadenará otras consecuencias muy negativas para todo el planeta.