La brecha digital no se limita a las diferencias generacionales, sino que engloba cualquier condición que produzca una desigualdad en el acceso y manejo de la tecnología. Por ello, es importante conocer todas sus caras y crear espacios que no dejen a nadie atrás. Eso mismo hace María Jesús Bonafonte, diseñadora de producto digital especializada en accesibilidad digital. Hablamos con la experta para entender qué necesita un espacio digital para que sea accesible, cómo podemos mejorar la experiencia de las personas con discapacidades y cómo luchar para que cerrar poco a poco esa brecha.

Pregunta.- ¿Qué es un espacio digital accesible?

María Jesús Bonafonte.- Un espacio digital accesible debe ser comprensible, utilizable y practicable por todas las personas, independientemente de sus capacidades, de la tecnología que estén utilizando y del contexto. Siempre en condiciones de seguridad, comodidad y de la forma más autónoma y natural posible.

P.- ¿Cuáles son los básicos de un espacio digital accesible?

M.J.B.- Existe un buen número de medidas que podemos llevar a cabo para hacer lo digital más accesible.

• Ofrecer alternativas de texto a elementos no textuales(imágenes, gráficos, iconos u otros) que no sean decorativos. En el caso de los medios audiovisuales: subtítulos, transcripciones y audiodescripción.
• Contraste de color. Es importante que sea distinguible el fondo del primer plano.
• Navegación por teclado.
• Dar tiempo suficiente para realizar las tareas. Como comprar una entrada o realizar un pedido.
• Tipografía legible y con un tamaño adecuado.
• Jerarquización correcta de los títulos.
• Formularios claros con instrucciones, campos etiquetados, muestra de los errores con texto y no solo a través del color.
• Que se pueda hacer zoom sin perder información.
• Que se pueda cambiar la orientación de la pantalla de móvil a horizontal y no se pierda información.
• No introducir movimientos rápidos y cambios bruscos de luminosidad(destellos) en elementos que puedan provocar convulsiones o molestias visuales.
• Compatible con tecnologías de asistencia como lectores de pantalla, por ejemplo.
• Lenguaje claro y sencillo que ayude a entender la información.

P.- ¿Cuándo te diste cuenta de que la necesidad que hay por hacer los espacios digitales accesibles?

M.J.B.- Cuando terminé la carrera de diseño gráfico y continué mi formación en desarrollo web y diseño de producto digital hice un curso que mostraba las barreras con las que se encontraban las personas con discapacidades a la hora de utilizar una web o producto digital y, desde entonces, mi trabajo ha ido enfocado en mejorar la experiencia para todas las personas, sobre todo de aquellas que durante tanto tiempo no se ha pensado.

Algo que hizo que aún lo hiciera con más fuerza fue lo vivido durante el confinamiento. Cuando pasamos aquellos meses en los que la tecnología nos ayudó a muchas personas a estar conectadas, hacer compras sin tener que salir, etc. para otras supuso un aislamiento total.

P.- A veces nos pensamos que la brecha digital es únicamente generacional, ¿puedes explicarnos por qué un diseño accesible también contribuye a luchar contra esa brecha?

M.J.B.- La accesibilidad es un derecho humano. Según la Declaración de Derechos Humanos todas la personas tienen derecho al trabajo(Artículo 23), a la salud(Artículo 25) y a la educación(Artículo 26) entre otros.Si no diseñamos los espacios digitales de forma que todas las personas puedan acceder a ellos, por ejemplo: aplicar a una oferta de empleo, poder pedir una cita médica, poder rellenar la matrícula de la universidad; les estamos privando de sus derechos.

Existen otros tipos de brecha digital como la económica y geográfica(por ejemplo las zonas sin conexión) y aquí la accesibilidad también ayuda. No todo el mundo tiene una conexión 5G perfecta por lo que la accesibilidad optimiza esas interfaces y hace posible el uso de una gran cantidad de productos

Se nos olvidan detalles como el idioma y que la accesibilidad sí tiene en cuenta y puede ser una gran brecha en el uso de productos digitales. Imagina a una persona inmigrante que no conozca el idioma del país donde se encuentra y tiene que rellenar documentación de la administración pública.

P.- ¿Podrías decirnos alguna función, algo simple, que la gente no suela conocer y que hace un espacio digital más accesible?

M.J.B.- En realidad, considero que todos los básicos son bastante sencillos de cumplir. Algo que seguramente se conozca pero que creo que merece la pena comentarlo dado que no se practica demasiado es el orden de lectura y el orden de foco. Etiquetar y colocar los elementos en el orden correcto tanto en web como en las capas de un documento es una buena práctica que hace que las personas usuarias de lector de pantalla tengan la misma experiencia que las personas que consumen la información de forma visual.

P.- ¿En qué tenemos que pensar al crear nuestra página para conseguir que sea accesible?

M.J.B.- Hay tres ideas que creo que son básicas.

• Lo primero, pensar que existen personas usuarias con diversas capacidades y contextos y empatizar con ellas.

• Segundo, debemos incluir a esas personas en los procesos de diseño siempre que sea posible.

• Tercero, todas las personas tienen derecho a acceder a esa página y tener la misma experiencia satisfactoria independientemente de sus capacidades.Además, cuando diseñamos de manera accesible innovamos en soluciones de las que todas las personas usuarias se benefician.

P.- ¿Puede la inteligencia artificial ayudar a hacer los espacios más accesibles?

M.J.B.- En mi opinión sí. Hay bastantes avances en el uso de la IA que están trabajando en este camino desde hace muchos años y que ahora se han perfeccionado. Por ejemplo:

• La generación automática de subtítulos y transcripciones. No solo en vídeo grabado sino en directo como ocurre en aplicaciones de llamadas online.
• El reconocimiento de voz para personas con discapacidad motora para interactuar por comandos de voz.
• Dispositivos en desarrollo que acompañan en tiempo real a personas ciegas a moverse por espacios o aplicaciones para identificar texto u objetos.
• También hay algunas tecnologías que están trabajando con IA generativa para la interpretación en lengua de signos en tiempo real.

P.- ¿Nos das algunos ejemplo de páginas web que sean accesibles y nos explicas el porqué?

M.J.B.- Las páginas que voy a mencionar tienen sus propias páginas de Declaración de Accesibilidad donde cuentan qué cumplen y qué les falta por cumplir. Al mismo tiempo, creo que son ejemplos de buenas prácticas:

• La página del Gobierno de Aragón.
• La página del Gobierno de Reino Unido donde se puede:
• Cambiar colores, niveles de contraste y fuentes mediante la configuración del navegador o del dispositivo.
• Ampliar hasta un 400 % sin que el texto se salga de la pantalla.
• Navegar por la mayor parte del sitio web utilizando un teclado o un software de reconocimiento de voz.
• Escuchar la mayor parte del sitio web utilizando un lector de pantalla(incluidas las versiones más recientes de JAWS, NVDA y VoiceOver).