Con motivo de las ayudas derivadas del plan de recuperación por la crisis de Covid-19 propuesto por la Unión Europea, el Gobierno ha adelantado que destinará parte de los fondos a la industria del motor. De esta forma, el Ejecutivo busca reducir el impacto de la crisis sobre el sector, con una inversión del 10% del presupuesto.
Durante una reunión con representantes de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC), Raúl Blanco, secretario general de Industria ha subrayado que España pedirá a Europa que destine al menos un 10% de las próximas ayudas, como principal punto de apoyo al sector del motor.
Por otra parte, Blanco ha abogado también por un plan de recuperación potente en España con ayudas a la compra de automóviles, que se base en la neutralidad tecnológica. De esta forma, el secretario de industria pide que no se deje de lado la movilidad basada en vehículos con motores diésel o de gasolina. Un punto que defendía el último plan MOVES aprobado en nuestro país.
Por su parte, desde ANFAC defienden que se ponga en marcha lo antes posible un plan de renovación de un parque automovilístico español muy envejecido. Además, destacan que las últimas medidas que se están planteando desde el Ministerio para la Transición Ecológica, como priorizar la bicicleta y apostar por un aumento de los carriles destinados a este vehículo, pueden perjudicar más que beneficiar.
Así, destacan la importancia de que España continúe posicionado como el segundo país líder en la fabricación de vehículos dentro de Europa. Algo que solo sería posible si se dan claras muestras de que el país sigue mostrándose amigable con el sector del automóvil.