Según el proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2017 presentado en el Congreso, la dotación destinada a las políticas de seguridad vial desciende un 1,9 % hasta los 740 millones de euros.
El presupuesto prevé que, tras varios años de descensos, se estabilicen los ingresos por multas y sanciones en 355.910.630 euros.
La mayor aportación, no obstante, provendrá de las tasas, con 548.137.050 euros presupuestados, para un total de 904 millones.
En cuanto a la inversión, el descenso de un 1,9 % en la partida de seguridad vial responde al proceso de centralización de los créditos para la gestión de los servicios de contratación centralizada.
El presupuesto servirá para implantar el proyecto de Tratamiento en Movilidad de Accidentes, Denuncias y Gestión de la Información general de tráfico (TRAMO).
Su objetivo es mejorar el sistema de gestión de sanciones con los ciudadanos y además la recogida de información en tiempo real de accidentes, incidencias de tráfico y de todo tipo de controles de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil.
Además, la Dirección General de Tráfico (DGT) continuará desarrollando un plan de investigación dirigido a las necesidades y responsabilidades de la Institución.
Tráfico mantiene tres objetivos "primordiales y permanentes del área": el primero de ellos disminuir el número de víctimas y de accidentes para contribuir al objetivo europeo de reducción del 50 por ciento de víctimas mortales en el año 2020 respecto a 2011.
Además, garantizar la movilidad a través de una adecuada gestión del tráfico y, el tercero, proveer la gestión de todos los trámites asociados a la gestión de la circulación, a través de la administración electrónica.