La fase 1 del ensayo ha comenzado este verano en la Clínica Universidad de Navarra y el Hospital de Amberes (Bélgica). En ella se ha aplicado en nueve pacientes en cada hospital, con distintas dosis del producto celular. En una aseguna fase se administrará a 21 pacientes más la dosis que se desmuestre más segura, según ha explicado el centro catalán.

La esclerosis múltiple es una enfermedad de tipo autoinmune en la que las defensas del cuerpo destruyen la mielina, una capa de proteínas y grasas que recubre el tejido nervioso del cerebro, el nervio óptico y la médula espinal; este desgaste dificulta la transmisión de los estímulos nerviosos y provoca problemas de fuerza, sensibilidad, equilibrio o visión.

El tratamiento, que desarrollaron las investigadoras catalanas hace diez años, cosiste en extraer células de la sangre del propio paciente, tratarlas en el laboratorio con vitamina D3 e introducirlas de nuevo en el enfermo; estas células, llamadas dendríticas, han sido reeducadas para que ayuden a frenar el ataque a la mielina y eviten así la progresión de la enfermedad.

La responsable de la Unidad de UM del Germans Trias i Pujol, Cristina Ramo, ha explicado que extraen las células mediante un proceso llamado leucoféresis: "Esta muestra leucocitaria se envía a la Universidad de Navarra, donde se seleccionan las células dendríticas y se tratan con la vitamina D3".

"Una vez tratadas y reeducadas inmunológicamente, vuelven a Badalona y se introducen en los ganglios cervicales del paciente. En total, cada enfermo recibe seis dosis en 14 semanas", ha detallado.

Esta nueva terapia podría tener menos efectos secundarios y ser más segura que los tratamientos que se utilizan en la actualidad, consisten en inmunosupresores, que aunque han demostrado ser eficaces, afectan a la totalidad del sistema inmune, sin discriminar las células enfermas de las sanas y reducen las defensas protectoras del cuerpo.