Investigadores de la Universidad de Bergen han encontrado una ballena de zifio o de Cuvier varada en la costa de la Isla de Sotra (Noruega), la primera documentada en esta zona y que se comportaba de una manera extraña.

El animal estaba enfermo y sufría, por lo que a los científicos no lesquedó más opción que sacrificarla.

Tras realizar la necropsia, han hallado en el estómago del cetáceo, al menos, 30 bolsas de plástico y otros tantos pequeños trozos de este material. En el vientre solo encontraron unos pocos restos de calamar, de la alimentación propia de la ballena. 

Los investigadores rápidamente relacionaron este hallazgo con el comportamiento y la enfermedad del animal.

En la actualidad, la contaminación marina es un problema creciente. Más de ocho toneladas de plástico se acumulan en los océanos, de los cuales el 80% proviene de la actividad humana, según datos del Programa Medioambiental de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).