Casi un siglo. En 1927 apareció por primera vez en la gran pantalla un robot. Se llamaba María y era una de las protagonistas de Metrópolis, la película muda alemana dirigida por Fritz Lang. Debajo de María estaba la actriz Brigitte Helm; en la piel de la humanoide Pris, en la fantástica Blade Runner, estaba la flexible Daryl Hannah; y tras Ava, la inteligencia artificial de Ex Machina, la imponente Alicia Vikander. También hemos escuchado a la actriz Scarlett Johansson poniendo voz a Samantha, el sistema operativo más listo y sensible de la California futurista en Her. Por no hablar de los actores que han hecho de androides en La guerra de las galaxias, Terminator, Robocop, etc…

No va a tardar mucho para que veamos por primera vez un robot de verdad interpretando un papel protagonista en una película. Su nombre es Erica y fue creada hace cinco años por el profesor japonés Hiroshi Ishiguro. Hay quien dice que es la más sofisticada en materiales y movimientos, pero si tiene algo Erica para haber sido elegida en el casting es su capacidad para conversar con el ser humano. Erica simula tener 23 años, tiene mezcla de rasgos, entre asiática y europea, y mide 1,66 m.

Erica protagonizará B, película de ciencia ficción financiada por Bondit Media Capital, una empresa especializada en largometrajes y televisión, con 70 millones de dólares. El argumento no es muy rebuscado: un científico descubre que el programa que ha creado para perfeccionar el ADN humano tiene más riesgos que ventajas y es entonces cuando decide ayudar a escapar a Erica, androide con inteligencia artificial (IA). Parte del rodaje se ha realizado el año pasado en Japón y en 2021 Erica se acercará a Europa para grabar lo que queda de película. Según la publicación The Hollywood Reporter, en el aprendizaje como actriz de Erica han aplicado métodos de actuación a la IA de Erica. “Pero Erica no tiene experiencias de vida. Tuvimos que simular movimientos y emociones a través de sesiones individuales, controlar la velocidad de sus movimientos, hablar sobre sus sentimientos y entrenar el desarrollo del carácter y el lenguaje corporal”, explican los impulsores del film. Sus programadores sostienen que Erica es un humanoide autónomo y social, con algoritmos entrenados para poder mantener diálogos.

La inteligencia artificial es una de las tecnologías disruptivas que más protagonismo va a ganar en los próximos años. En Europa, varias plataformas trabajan para que se haga un buen uso, tanto en empresas como en las administraciones públicas, de la IA. Si hablamos de cine, redes neuronales de IA están ayudando a colorear las primeras cintas cinematográficas.