Casi todos los últimos avances tecnológicos desarrollados para contener el coronavirus tienen su epicentro en China, donde se localizó la primera infección. El impresionante despliegue del país asiático para frenar la pandemia ha puesto en circulación todo tipo de máquinas y dispositivos electrónicos. Unos parecen más útiles que otros. Ahora surge el debate sobre si el uso de ciertas tecnologías puede ser un ensayo para nuevas formas de control social que afectarán en el futuro a la intimidad y la libertad de movimientos.

Con más de 4200.000 diagnosticados a día de hoy, cerca de 19.000 muertos y más de 107.000 pacientes curados en 178 países, el COVID-19 ha provocado una actividad incesante del sector tecnológico para buscar soluciones.

Estos son algunos de los dispositivos más curiosos que intentan evitar más contagios:

  • Robots camareros.
  • La ciudad china de Hangzhou cuenta con un nuevo androide llamado Peanut. Para evitar que se propague el virus, uno de los hoteles de la ciudad utiliza robots para dar comida a los viajeros que se encuentran aislados en sus respectivas habitaciones. Las gestiones telemáticas del robot se realizan a través de We Chat para que el personal del hotel no tenga que correr ningún tipo de riesgo.
  • Drones termómetro.
  • En el barrio de Zhangjiagang (Wuhan, China), un dron se acerca a las ventanas de los hogares de una comunidad de vecinos que permanece en cuarentena para medirles la temperatura. Lo mismo ocurre en Pekín o Shanghai, donde estos aparatos voladores equipados con cámaras técnicas sobrevuelan a todos los vecinos de un mismo edificio.
  • Mascarillas inteligentes.
  • Las mascarillas están agotadas en supermercados, farmacias y otras plataformas, a pesar de que los expertos afirman que no sirven para mucho, a menos que contengas el virus. Más allá de las tradicionales, Xiaomi ha sacado a la luz una mascarilla eléctrica antigérmenes que se carga por USB. El dispositivo cuenta con un filtro dinámico que trabaja en todo momento para limpiar el aire que llega a nuestros pulmones.
  • Ascensores holográficos.
  • China ha tomado medidas exhaustivas para evitar la propagación del Covid-19, hasta el punto de crear ascensores sin botones físicos para prevenir y evitar contagios. Las teclas para poder acceder a cada piso se presentan de forma holográfica.
  • Códigos QR.
  • Una de las medidas más avanzadas que ha utilizado China contra el coronavirus fue la creación de códigos QR personalizados que cambian de color (verde, amarillo o rojo) en función de la posibilidad de que una persona esté contagiada o no por el COVID-19. Este sistema se utiliza para poder entrar en residencias, oficinas, los pocos restaurantes abiertos o el transporte público. Alipay Health Code es un software administrado por el Gobierno chino que ficha a los ciudadanos dependiendo de si han estado o no en zonas de contagio o cerca de infectados. Si tienes código rojo o amarillo, será mejor que no te muevas de tu domicilio. El diario The New York Times ha explicado que este sistema, además de decidir en tiempo real si alguien supone un riesgo, comparte la información con la policía.
  • Mascarillas y respiradores 3D.
  • Mascarillas y respiradores fabricados con impresoras 3D son los primeros materiales sanitarios que se van a poner a disposición de hospitales y otros organismos en España para ayudar a combatir el coronavirus. Cientos de voluntarios, entre ellos médicos, ingenieros, diseñadores e impresores 3D, están trabajando en distintos puntos del país, coordinando conocimientos y esfuerzos. Todo comenzó con un grupo de mensajería instantánea encabezada por Jorge Barrero, director general de la Fundación Cotec para la innovación tecnológica y miembro del Comité de Expertos de Levanta la cabeza.