El Comité Español de Representantes de personas con discapacidad (CERMI) ha puesto en marcha ‘MetaDiverso, CERMI Discapacidad’, un proyecto de transformación digital con dimensión inclusiva para “tener a la tecnología como aliada de lo social para construir políticas públicas a partir de datos que muestran el impacto social relevante en la vida de las personas con discapacidad”.

Ha sido en el encuentro de presentación de esta iniciativa donde el CERMI ha reclamado configurar la Inteligencia Artificial al servicio de la inclusión. “No podemos quedarnos fuera de la IA, ya que somos ciudadanos como el resto de la sociedad. Esto es una clara evidencia de cómo podemos defender los derechos de las personas con discapacidad, ya que la IA es la ‘metatendencia’ que afecta al mundo en este 2023”, ha afirmado la directora de Transformación y Excelencia de Fundación ONCE, Virginia Carcedo.

En este sentido, Carcedo ha destacado los diferentes proyectos impulsados por Fundación ONCE donde la tecnología ha jugado un papel fundamental para las personas con discapacidad, tanto a la hora de encontrar oportunidades laborales, como en el acceso a nuevos dispositivos o la obtención de una mayor formación.

Por su parte, la presidenta del Grupo de Trabajo de Transformación Digital del CERMI, Teresa Palahí, ha compartido que el principal objetivo de la organización es “la transformación digital para que los derechos de las personas con discapacidad y sus familias se cumplan y puedan acceder a puestos de trabajos con algoritmos de trabajo e inclusión”.

De esta manera, el proyecto ‘Metadiverso’, apoyado por los fondos europeos para modernizar las entidades del Tercer Sector, busca presentar la tecnología como hilo conductor en la unión de procesos y personas con un objetivo claro: lograr un mayor impacto social en las personas con discapacidad, sus familias y sus entidades representativas.

En este encuentro, el subdirector general para el Avance de la Sociedad Digital y de la IA en la Comunidad Valenciana, Matías Mas Gisbert, ha señalado que desea que las tecnologías “sirvan para transformar la vida de las personas y para la igualdad social”. Así, Mas Gisbert ha instado a que la tecnología no fuera selectiva, sino inclusiva, y se asegure de que nadie se queda atrás.