El Consejo Escolar de Estado ha dado un paso significativo en la regulación del uso de dispositivos móviles en los centros educativos al aprobar por unanimidad una propuesta que prohíbe el uso de móviles en primaria y limita su utilización a fines pedagógicos o médicos en secundaria. La medida, que busca combatir las distracciones y conductas disruptivas causadas por el uso inadecuado de estos dispositivos, ha recibido el respaldo del Ministerio de Educación, liderado por Pilar Alegría.
La propuesta, presentada por el máximo órgano consultivo en materia educativa del Gobierno, destaca los problemas derivados del uso abusivo de dispositivos electrónicos, que generan distracciones perjudiciales para la convivencia en los centros educativos. El Consejo de Estado enfatiza la importancia de avanzar hacia una educación digital responsable, estableciendo límites de tiempos y espacios tanto dentro como fuera de las instituciones educativas.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), el 25 % de los niños de 10 años y el 50 % de los de 11 ya poseen un teléfono móvil. A partir de los niños de 12 años el porcentaje alcanza el 70 %. Se destaca que el tiempo promedio que un estudiante tarda en recuperar la atención después de recibir una notificación es de aproximadamente 20 minutos, según el informe GEM 2023 de la Unesco.
En el caso de la educación infantil y primaria, el documento sugiere que los alumnos no necesitan llevar móviles a la escuela, a menos que existan razones individuales específicas, como problemas de salud u otras circunstancias debidamente justificadas.
En cuanto a la educación secundaria, se propone que los móviles permanezcan apagados durante los periodos lectivos, recreos, actividades complementarias y extraescolares. Sin embargo, se permite su uso con fines educativos supervisados o por razones de salud debidamente justificadas. Para las enseñanzas postobligatorias, la regulación queda en manos de las direcciones de los centros educativos.
La ministra de Educación, Pilar Alegría, ha expresado su acuerdo con las recomendaciones del Consejo de Estado y tiene previsto llevar esta propuesta a las comunidades autónomas en una reunión programada para el próximo 31 de enero. El Ministerio de Educación ya había propuesto en diciembre a las comunidades autónomas restringir el uso del teléfono móvil en los centros educativos.
El Consejo de Estado sugiere que la regulación del uso de móviles en los centros educativos debe contar con criterios básicos comunes y ser incluida en los reglamentos de régimen interior de cada institución. Además, se recomienda acompañar estas medidas con acciones como el refuerzo de departamentos de orientación y tutorías, la revisión de tiempos y horarios, la oferta de alternativas de ocio durante el recreo, y un proceso de formación que contribuya a una educación digital responsable.
La medida ha sido adoptada en un contexto en el que el impacto del uso personal del móvil en el rendimiento académico y su empleo para actividades perjudiciales, como el acoso a través de redes sociales, han llevado a un creciente número de países a prohibir su uso en las aulas. Países como China, Alemania, Francia e Italia ya han implementado medidas para restringir el uso de dispositivos móviles entre niños y adolescentes.
En España, el debate sobre el uso del móvil entre niños y adolescentes ha ganado relevancia en diversas comunidades autónomas, siendo Murcia la última en sumarse a la regulación, prohibiendo su uso en horario lectivo desde enero. Otras regiones como Castilla-La Mancha, Galicia y Madrid ya habían implementado regulaciones en años anteriores, mientras que Cataluña, Andalucía, Asturias y Baleares han anunciado medidas restrictivas en los últimos meses, evidenciando una creciente preocupación por este tema a nivel nacional.