La movilidad segura y sostenible surge precisamente de la preocupación por los problemas ambientales y sociales ocasionados por este modelo que conlleva, entre otros inconvenientes, la contaminación del aire, el consumo excesivo de energía, los efectos sobre la salud de una población o la saturación de las vías de circulación. Ante esta situación, la necesidad de potenciar el transporte público y otras alternativas de movilidad cobra cada vez más relevancia.

Con esta nueva acción, lanzada junto a Fundación AXA, Ponle Freno busca interiorizar y transmitir que todos podemos y debemos convivir haciendo un uso racional y seguro de las diferentes opciones de movilidad. Pensar dónde queremos ir, cómo podemos hacerlo y elegir aquella alternativa más eficiente y adecuada a las circunstancias, sin olvidar por supuesto la seguridad vial.

Para ello, Ponle Freno lanza una serie de spots que Atresmedia emitirá en todos sus canales de televisión y radio, y contará, asimismo, con contenido específico en ponlefreno.com.

En ellos, plantea situaciones que vivimos todos los días y propone alternativas desde un punto de vista más sostenible, para cerrar con el mensaje: “Te muevas como te muevas, hazlo de forma segura”.

También utilizará el hashtag #TeMuevasComoTeMuevas como parte de las acciones para que los ciudadanos también puedan compartir y comentar otras ideas de movilidad.

Dentro de su compromiso para abordar este reto, Ponle Freno organiza también las Jornadas 3.0 sobre las nuevas formas de desplazamiento desde un punto de vista seguro y sostenible.

Actuaciones desde el ámbito personal al social

Estas actuaciones de movilidad sostenible dirigidas a reducir los citados efectos negativos nos atañen a todos y pueden desarrollarse desde el plano más personal, con una sensibilización individual hacia estos problemas (desplazarse a pie, en bicicleta o en transporte público), al empresarial (aplicaciones tecnológicas, teletrabajo, rutas), pasando por el de las administraciones, políticas y otros agentes sociales que sensibilicen a la población o promuevan dichas prácticas.

Cada decisión en este sentido será un avance para lograr, no solo una mejor convivencia en las ciudades, sino también una serie de beneficios externos como la salud, el bienestar y el cuidado del medio ambiente.

No hay que olvidar que, en países como España, el transporte representa la cuarta parte de las emisiones de gases de efecto invernadero y el 36% del consumo de energía o que el 80% del espacio público de las ciudades está destinado a la movilidad y esta no tiene por qué ser siempre en coche particular.