Llevar el coche a revisión, usar siempre el cinturón de seguridad, no consumir alcohol ni drogas al volante y evitar distracciones provocadas por la manipulación de dispositivos electrónicos son algunas de las recomendaciones para aumentar la seguridad en carretera esta Navidad.
El objetivo es que todos lleguemos y volvamos de nuestros hogares en estas fechas. Por eso, te invitamos a seguir el siguiente decálogo.
1.El coche a punto, fundamental
Realizar las revisiones que establece el fabricante del vehículo es la primera pauta básica. Además, se debe examinar periódicamente elementos como la presión de los neumáticos, los niveles de aceite, agua y líquido de frenos, o el depósito del limpiaparabrisas.
2.Planificar el viaje
Planear la ruta con antelación y establecer algunos puntos de parada ayuda, sobre todo si la distancia es larga, a que el viaje resulte más agradable y menos pesado.
Si durante el trayecto quedas atrapado en un atasco evita, por todos los medios, estresarte y tocar el claxon. La solución pasa por cerrar las ventanas para aislarse del estrés, poner música relajante y tener paciencia.
3.Parar y descansar, contra el sueño
La fatiga y el sueño son los peores enemigos al volante. Por ello, lo aconsejable es parar y descansar unos 15 minutos cada 200 km o cada dos horas y nunca sobrepasar las 8 horas de conducción en una misma jornada.
Si te sorprende el sueño, para y duerme unos 20 minutos y recuerda que el café también te puede ayudar a despejarte.
4.Para viajar… ¡evita la noche!
La noche presenta dos grandes peligros: el sueño y la menor visibilidad. Por ello, es recomendable viajar durante el día y si es por la mañana, una hora después de que haya amanecido.
Si no te queda más remedio que conducir durante la noche, conviene que busques algún tipo de estimulación para evitar el sueño como escuchar la radio, llevar un acompañante con quien charlar, no circular por vías monótonas, etc. Además, para no coincidir con toda la “avalancha” de gente y no quedar atrapado en terribles atascos, lo mejor es optar por un horario poco habitual.
5. 5 sentidos, 0 distracciones
Cualquier cosa, hasta el más mínimo detalle, puede distraerte al volante y tener consecuencias fatales: desde preocupaciones personales o pensamientos hasta lo que ocurre fuera del vehículo como un animal que se cruza, otro coche... ¡Al volante, siempre con los cinco sentidos!
Según la Dirección General de Tráfico (DGT) en 2013 más de 34.000 accidentes con víctimas (un 38% del total) se generaron a causa de una distracción; el porcentaje aumenta hasta un 44% en el caso de accidentes ocurridos en vías interurbanas. Las salidas de vía, las colisiones por alcance y los atropellos son los tipos de siniestros que más se producen por despistes al volante.
La distracción más frecuente en la actualidad es el uso del teléfono móvil. Por ello, para contribuir a hacer desaparecer este dato, el uso de la app Drive Smart no implica la manipulación del dispositivo móvil en ningún momento durante la conducción. Cuando vayas a realizar un viaje únicamente deberás activar la app antes de iniciar la marcha o vincularla a tu coche a través del bluetooth para que se inicie automáticamente cada vez que arranques.
6.Alcohol y drogas, malos compañeros de viaje
En estas fechas llenas de comidas y reuniones, si el alcohol se convierte en protagonista… ¡no cojas el coche!
7.Usa siempre los sistemas de retención
El cinturón de seguridad es de uso obligatorio en todos los asientos del vehículo. En el caso de viajar con niños, si éstos no miden más de 1,35 cm de estatura, deberán ir sentados en sus correspondientes sistemas de retención infantil.
8.No corras… ¡lo importante es llegar!
Con o sin prisa, respeta los límites de velocidad: lo importante es llegar a casa (aunque sea media hora más tarde) y poder disfrutar de estos días tan especiales con nuestros seres queridos.
En España los excesos de velocidad en carretera causan casi 500 muertes al año. Según datos de la DGT, uno de cada cuatro fallecidos en accidente de tráfico lo es a causa de la velocidad.
9.Las celebraciones, fuera del coche
A pesar de ser fechas de celebraciones, conviene evitar que éstas se trasladen al interior del vehículo. Conviene, por tanto, no llevar la música a tope o ir bebiendo en el coche (aunque no sea el conductor del vehículo). Se trata de no celebrar en el coche lo que puedes disfrutar fuera de él… ¡con más diversión y sin riesgos!
10.Con lluvia, niebla o nieve…
La climatología puede suponer un grave riesgo para la conducción cuando es adversa, algo muy habitual en las fechas en las que nos encontramos. Lo más normal es que podamos encontrarnos con lluvia, niebla o nieve, pero… ¿Cómo hay que comportarse en estos casos?
•Con lluvia:
Reducir la velocidad y aumentar la distancia de seguridad. De esta forma se evitarán colisiones por alcance en caso de tener que frenar bruscamente así como el denominado “efecto spray” (lluvia pulverizada y sucia que va a parar a tu parabrisas). Es recomendable aumentar la distancia al doble de la recomendada en condiciones normales ya que la capacidad de frenada de un coche sobre mojado, incluso con ABS, es muy diferente respecto al firme seco.
Atención a los charcos y balsas de agua que pueden dar lugar al llamado “aquaplaning”: un efecto producido cuando los neumáticos son incapaces de evacuar el agua que hay en la calzada y pierden el contacto con el pavimento. En este caso reduce la velocidad pero nunca frenes ni intentes cambiar la trayectoria.
Hacerse visible encendiendo las luces de cruce. Los días de lluvia son mucho más oscuros por la nubosidad, unido al hecho de que la propia lluvia reduce la visibilidad. Si la lluvia es muy intensa se recomienda encender las luces antiniebla.
•Con niebla:
Al igual que ocurre con la lluvia, la visibilidad y la adherencia son menores cuando hay niebla, por lo que se debe aumentar la distancia de seguridad y reducir la velocidad.
Encender las luces antiniebla. No se debe accionar la luz larga, ya que se refleja sobre la niebla y puede deslumbrar al propio conductor.
•Con nieve:
Reducir la velocidad y evitar las frenadas y los acelerones bruscos. Deben ser progresivos y suaves.
Utilizar cadenas o neumáticos especiales en caso extremo. Hay que tensar las cadenas tras recorrer los primeros 100 metros. Las cadenas se deben retirar cuando no haya nieve para evitar que se dañen los neumáticos y el asfalto.
Si se va a conducir por zonas de nieve, conviene llevar el depósito siempre lleno ante la posibilidad de quedarse bloqueados.
Estar atento ante la posible existencia de placas de hielo, que no siempre se detectan fácilmente. Suelen encontrarse en zonas húmedas y oscuras. En este caso, conviene reducir la velocidad con la marcha más larga posible y aumentar la distancia de seguridad.