Para llegar a esta conclusión, se ha analizado cuanto carbono se puede emitir al planeta para no superar los límites establecidos en la Cumbre del Clima de París de 2015, donde se fijó que la temperatura del planeta no puede haber aumentado más de 1,5ºC en 2100.

Los expertos consideran posible que se cumpla este objetivo de la Cumbre del Clima de París. De igual modo, explican que el calentamiento global provocado por el ser humano ha causado que la temperatura de la superficie en 2015 fuera 0,93ºC más alta que la registrada a mediados del siglo XIX.

Para llegar a estos resultados, los investigadores unieron un modelo climático de carbono simple con propiedades clave del sistema climático y con datos de la situación del clima actual ,para calcular el presupuesto de carbono restante compatible con los objetivos fijados. Así, si se reducen los gases de efecto invernadero distintos al CO2 y continuos ajustes a la baja de éste, podrían emitir entre 250 y 540 gigatoneladas, según los expertos, lo que sería compatible con el objetivo del Acuerdo de París.

Por otro lado, es necesario que los países firmantes refuercen sus medidas contra el cambio climático y realicen reducciones pronunciadas y rápidas, según los últimos datos del calentamiento global.

Si se fortalecen las reducciones de emisiones a corto plazo, este colchón podría servir de protección ante una futura “respuesta climática fuerte” o “tasas de reducción subsiguientes que resulten inviables desde el punto de vista económico, técnico y político”, han subrayado los expertos.