Los investigadores afirman que "una herramienta como ésta ayuda a las comunidades comprender mejor el potencial de un sistema en el cual las aguas pluviales y el agua reciclada se convierten en recarga de agua subterránea".

Este sistema permite combinarlas con el único enfoque de recargar las aguas subterráneas con aguas residuales que ya están tratadas para el consumo humano.

En Estados Unidos esta manera de reciclar y capturar agua no es nueva, sino que ya se vienen aplicando en la mayor parte de los estados.

En California encuentran un gran problema: los acuíferos subterráneos se están secando, lo que agrava aún más la escasez. Según datos de la Oficina Gubernamental de Contabilidad (GAO) de EEUU, para el año 2024 al menos 40 estados tendrían problemas con el abastecimiento de agua.

El uso de agua reciclada en el mundo está en aumento, pero es necesario mejorar aún más los sistemas de uso y reutilización de agua.

En California, por ejemplo, se recicla alrededor del 15 % de sus aguas residuales disponibles, pero el estado quiere duplicar o triplicar la cifra para el año 2030.

Iniciativas como AquaCharge permite a las comunidades prepararse mejor para las sequías futuras y los efectos del cambio climático. Por el momento, este proyecto no tiene aún una fecha de salida.