El exceso de exposición a las pantallas trae consigo la conocida como ciberfatiga. Cansancio, hastío, pereza y frustración son algunas de las consecuencias de la hiperconexión. En este sentido, un estudio realizado por la Universidad Tecnológica de Queensland (Australia) revela que el uso del teléfono móvil puede causar pérdida de sueño, ansiedad, disminución de la capacidad productiva, mayor riesgo en la conducción y dolencias.

En conclusión, se vuelve imperativo encontrar fórmulas para reducir el tiempo que pasamos con los dispositivos electrónicos. Sobre todo, con el teléfono móvil. Para reducir la dosis de pantallas, hay una serie de recomendaciones muy prácticas. Pero también se puede poner límites a este panorama haciendo uso del propio ‘smartphone’ como herramienta para tal fin.

Screentime genie, la app de la Universidad de Stanford para reducir el consumo de pantallas

Screentime genie (algo así como genio del tiempo de pantalla), es una aplicación desarrollada por un grupo de investigadores del Laboratorio de Diseño de Comportamiento de la Universidad de Stanford (California, Estados Unidos). El equipo, dirigido por el Dr. BJ Fogg, creó esta plataforma para ayudar a conectar a los usuarios con diversas soluciones existentes para adecuar su tiempo de uso de pantallas.

Esta iniciativa nació en 2019 en una clase de Diseño de comportamiento para el tiempo de pantalla impartida por el Dr. BJ Fogg. Desde su lanzamiento, ha ayudado a miles de personas a reducir la exposición no deseada a los dispositivos, ahorrando unas 14.000 horas de procrastinación a sus usuarios.

Por lo pronto, se trata de una versión web. Pero actualmente el equipo se encuentra recaudando fondos para una integración en múltiples plataformas, crear una aplicación móvil, módulos de aprendizaje automático y otros experimentos para mejorar su funcionamiento.

Su objetivo es, según su página web, ahorrarle a la humanidad miles de millones de horas desperdiciadas y convertirse en el centro de intercambio de soluciones efectivas y éticas para las adicciones a la pantalla y las distracciones digitales. Pretenden transformar la relación colectiva con los dispositivos digitales para fomentar un tiempo de pantalla productivo, saludable e intencional.

¿Cómo funciona Screentime genie?

En primer lugar, debes acceder a https://screentime.stanford.edu/. Una vez ahí, aparecerá tu ‘genio’, que promete hacer realidad todos tus deseos relativos al uso de pantallas.

En un formato de conversación tipo chat, el genio te va haciendo preguntas que tú has de contestar. Desde tu nombre y tu email (solo para remitirte tus resultados, sin ningún otro uso de tu información), hasta cuáles son tus prioridades relativas al uso de pantallas. Deberás escoger entre una serie de opciones, como por ejemplo pasar tiempo en familia, mejorar tu calidad del sueño, reducir el uso de redes sociales, las distracciones, mejorar tu mindfulness…

También deberás marcar cuál es tu prioridad principal entre las opciones que escojas, así como qué plataformas usas (iOS, Android, Chrome…). Finalmente, el genio te preguntará qué nivel de motivación y compromiso tienes para lograr estos objetivos (bajo, medio o alto). En base a todos los resultados recopilados, la aplicación te sugiere una serie de soluciones que se adaptan a ti. Se trata de diferentes herramientas que puedes utilizar para que tu tiempo en pantallas sea más reducido y también productivo, consciente y sin distracciones.

Por ejemplo, una extensión de Chrome que limita el tiempo que pasas en el correo electrónico o una extensión de YouTube que elimina las sugerencias de otros vídeos relacionados con el que estás viendo. También te da consejos como eliminar las redes sociales del móvil y consultarlas solo en el ordenador, cerrar sesión en las aplicaciones después de utilizarlas o unirte a una comunidad online de ayuda para resolver problemas de procrastinación y disciplina.

Screentime genie es una herramienta totalmente gratuita y segura. Un excelente ejemplo de cómo las tecnologías pueden ser, en sí mismas, una solución para promover un uso responsable de internet, las redes sociales y las pantallas en general.